lunes, 26 de octubre de 2009

Cuando Nos Sentimos Malditos

¿Alguna vez has llegado al punto de sentirte tan agobiado por tus problemas, tan fracasado que sientes que Dios te ha dado la espalda y que todos los errores que cometiste en el pasado jamás permitirán que logres tener un poco de felicidad?

Llegas a un punto en que gritas al cielo: Donde encuentro un Dios de amor que me ame y a quien yo pueda amar!!!!

Deudas, fracasos, desamores, faltas de oportunidades, personas que te lastimaron, hermanos de iglesia que te humillaron y te hicieron sentir menos, familia que te hizo la vida tan miserable que jamás lograste entender que significa el amor en tu vida, salir de tu hogar y no querer regresar a la noche, desear que ese día algo te pase y te quite la vida, querer salir corriendo de tu trabajo porque nunca has sido feliz en lo que haces, querer huir a otro país y comenzar una vida nueva donde nadie conozca de ti y tu pasado, actitudes tuyas que no te dejan tener una vida feliz, pecados ocultos que solo tú conoces y que quisieras gritárselos a alguien para tener un poco de paz mental, algún amor que te hizo daño que destrozo tanto tu corazón que temes fracasar de nuevo en ese sentido, comer hasta hartarte porque es la única forma que sientes que obtienes paz pero después te frustras al tener sobrepeso, ver que tus amigos del colegio se están graduando y tu ni siquiera has comenzado tu carrera, ver que muchos de tus amigos y hermanos de la iglesia poseen un buen empleo y tienen sus comodidades y tú no tienes ni para el pasaje del autobús, vives una vida de aparente felicidad pero al llegar la noche tu almohada queda empapada de tantas lagrimas negras que pronuncian tu alma quebrantada…

Si alguna de estas cosas estas pasando u otras que no he mencionado esto que escribiré ES PARA TI.
Probablemente alguna vez te has dicho a ti mismo, estoy maldito, toda mi vida ha sido de continuo fracaso, mis padres cometieron muchos errores y ahora tengo la carga de llevarlos yo y he sido maldecido y por más que me esfuerce por lograr ser triunfador no podre porque estoy maldito.

Pues déjame decirte que NO ESTAS MALDITO, lo que tú tienes es a lo que llamare: problema de desconfianza celestial, si mi amigo, lo que tú tienes es el problema de cómo te ves a ti mismo, Dios cuando fundó la tierra le dio a Adán la potestad de gobernar sobre la tierra, peces, aves, mamíferos, plantas, todo, le dio una ayuda idónea que compartiría esa noble tarea, Vivian en un mundo de grandes alegrías donde el temor y frustración no existían en el lenguaje, pero cuando entro el pecado la lucha milenaria entre el bien y el mal afecto tanto a nuestra vida que si pesáramos en balanza aparentemente lo malo tiene mayor proporción que lo bueno, y sabes, es entendible que de alguna forma nos sintamos malditos, pero quiero decirte en el nombre del Señor que la maldición llego a su fin para tu vida.

Éxodo 20: 5 habla de que Dios visita la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen..

¿Entonces estamos perdidos, estaremos malditos y afectara no solo a mí sino a mis hijos?

Claro que no, porque mira ahora esta bella promesa en el verso 6:
Pero trato con invariable amor por MIL generaciones a los que me aman y guardan mis Mandamientos.

Si mi amado amigo, que son 3 o 4 generaciones malditas comparadas con Mil generaciones benditas, NO ES NADA.


Dios te da la promesa hoy de libertar tu vida, de borrar esa aparente maldición de tu vida, basta ya de lagrimas de sufrimiento, basta ya de gente que te dañe, basta ya de sentirte bajo la bota de Satanás, basta ya de creernos inferiores, somos Hijos de Dios, vivamos como tal!!! Dios no te hizo para ser mendigo de este mundo, Dios te puso como príncipe de las naciones para testificar cuán grande es Él.

Es cierto que la vida cristiana es una vida donde seremos muy atacados por el enemigo, porque no luchamos contra hombres, sino contra potestades y principados, pero hay una promesa mi amado amigo y es que si estas del lado del Señor el enemigo no tocara tu vida, por tanto quita tu rostro triste, deja de recordar lo que corroe tu corazón, deja de darle cabida a pensamientos de inseguridad, deja de sentirte vacio y derrotado, se que te sientes fracasado, pero Dios del fracaso hace un éxito, Dios te pondrá en alto delante del universo, Dios no se limita a un éxito terrenal, Dios desea darte un éxito celestial que sobrepasa todo entendimiento humano, por tanto en el nombre del Señor yo te invito a que en este momento entierres en lo profundo del mar todo tu pasado, se que tienes luchas pero deja de luchar tu con ellas y deja que quien llevo la cruz luche tus luchas, dile a Dios: Ten tu el control. Dile a Dios: Te honrare y glorificare en las buenas y en las malas. Dile a Dios: Señor desde este momento te entrego el control de mi vida.

Amigo Dios desea hacerte feliz, no te sientas mas maldito, no lo estas, eres un regalo que Dios puso en el mundo para ser apreciado, no hay cosa en este mundo que pueda tener tanto valor como lo tienes Tu.

Por tanto te invito, levántate, sal afuera, mira el cielo, y reclama las victorias que Dios prometió en su palabra.

No estás Maldito, No lo estas.

Con Aprecio.

Heber Villalta Romero

1 comentario:

  1. que lindo querido amigo!!!!! me llegaron algunos comentarios..... espero poder aumentar m confianza e Dios y mirar solo hacia arriba.... que Dios te bendiga mucho!!!!TQ

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